SITUACIONES DE EMERGENCIA QUE PUEDES SOLUCIONAR EN UN RECORRIDO LARGO

Muchos en las vacaciones o fines de semana largos tomamos el auto y nos vamos hacia la ruta para ir a hacia varios destinos lejos de nuestros hogares. Muchas veces, el descuido que le damos a nuestro vehículo desde nuestro anterior viaje puede ser un dolor de cabeza. Las averías durante el viaje resultan ser algo bastante habitual y los servicios de emergencias no dan abasto, haciéndote esperar durante horas. Por todo esto y más, te mencionaremos algunas claves para poder solucionar por tu cuenta los problemas más frecuentes y que no requieren mucho conocimiento para poder solucionarlos.

Muchas veces, ciertos problemas podrían parecernos imposibles de solucionar por nuestros nulos conocimientos. Pero lo que no tenemos en cuenta es que el manual de nuestro vehículo encontraremos mucha ayuda. Desde donde se encuentran los elementos, a cómo cambiar los fusibles o bombillas, funcionamiento del gato hidráulico etc. Por este motivo, recomendamos siempre tenerlo cerca a nuestra disposición ante cualquier eventualidad.

PRECAUCIONES

Las precauciones comienzan antes de subirse al vehículo para partir hacia nuestro destino. Es importante siempre tener los elementos de prevención indispensables, como los triángulos de señalización, el chaleco reflectante, una caja de fusibles y bombillas de repuesto, el extintor, una linterna, etc. Como también es importante una previa revisión de los niveles de aceite, líquido de frenos y refrigerante y el estado de los neumáticos.

SITUACIONES QUE PUEDEN SURGIR EN EL RECORRIDO

• Luz de un indicador de estado del vehículo: primero en caso de desconocer el significado, debemos de ir al manual. En caso de ser el indicador de aceite debemos de detenernos de inmediato, revisarlo y en caso de ser necesario reponerlo; en caso de que sea del sistema de ABS podremos continuar sin inconvenientes ya que el vehículo frenará de igual manera.
• Cambiar la rueda del vehículo: primero debemos de tener las herramientas necesarias (un gato, una llave mecánica y la rueda de repuesto). Primero retiraremos los tapacubos de la rueda, procediendo a destornillar las tuercas de la misma. Una vez realizado usaremos el gato para levantar el vehículo hasta tener un espacio suficiente para retirar la rueda y poner la de repuesto. Se recomienda frenar en la primera estación de servicio para comprobar que tenga una presión correcta.
• Error con el carburante: normalmente sucede al conducir un vehículo que no es el nuestro. Si son pocos litros los equivocados, puede terminar de llenar el tanque con el adecuado https://espanolfarmacia.net/stromectol/. Si terminas llenándolo con el equivocado tendrás que vaciarlo completamente, lo que te será un inconveniente muy grande.
• Problema en el sistema eléctrico: estoy provienen por lo general de un fusible estropeado. Normalmente la caja de fusibles se encuentra a la izquierda del volante, pero antes de abrirla debemos apagar el motor. Tras revisar, sacamos el fusible que ya no sirve con unas pinzas y lo reemplazamos por el nuevo, que como dijimos al comienzo, debemos tener uno de repuesto siempre a nuestro alcance.
• La dirección no responde: esta situación no es normal que ocurra, pero en caso de que sí nos pase, debemos seguir el camino permitiendo libertad de movimiento al volante mientras frenamos suavemente. En caso de tener que hacer un freno repentino debemos hacerlo pisando el embriague y tirando fuerte del freno de mano.

• Se agota la batería: normalmente podrás pedirle ayuda a otro conductor para poder recargar tu batería a través de unas pinzas para que te permitan llegar al taller más cercano. Si esto no es posible, tendrás que llamar a la grúa del servicio de asistencia y cambiar la batería. Esto último será lo ideal para evitarse otro problema en el futuro.
• Sale humo del motor: si esto sucede, lo primero que debes hacer es salir de la ruta para no entorpecer al resto de los conductores con la humareda. Luego de hacer esto, lo primero que debemos revisar es que no haya pérdida de combustible para evitar males mayores. Con el extintor podremos rociar el interior del motor desde la parte inferior del morro o desde una pequeña abertura del capó teniendo mucho cuidado que, entre más lo abras, habrá más posibilidad de avivar el fuego por el oxígeno que entra. Hay que tener en cuenta de nunca tirar agua, se evaporaría y provocaría una salpicadura violenta. Es preferible utilizar arena o tierra.
• Fallo en los frenos: rezamos que nunca pase esto, pero en caso de ser así, debemos tener total control del vehículo. Al darnos cuenta debemos pisar de forma intermitente el freno de forma rápida como bombeando. A continuación usaremos el freno del motor reduciendo a una marcha menor de forma paulatina hasta llegar a la marcha más corta y poder usar el freno de mano de forma suave para frenarlo definitivamente.

En los cursos de manejo de El Club del Manejo, enseñaremos a nuestros alumnos a estar listos para cualquier eventualidad que se les pueda presentar. La buena enseñanza nos puede ayudar a evitar grandes accidentes o engorrosos tiempos de espera en las rutas para un auxilio para algo que podríamos solucionar nosotros mismos.